Los relojes de la marca francesa Boucheron son unas verdaderas obras de arte que, históricamente, se remontan a 1858 cuando Frederic Boucheron, un joyero de 28 años de edad, abrió su primera boutique en la Plaza Vendôme, y se convirtió en un icono en el mundo de la “Haute Joaileri “. La marca se hizo famosa por sus creaciones de joyería de lujo que utilizan productos de alta calidad para crear incomparables y refinados relojes, siempre en armonía con la naturaleza.

La boutique fue inaugurada en 1893, y una decisión favorable fue seleccionar una decoración de terciopelo adornado con cristales, lo que llamó la atención de todos los que visitaban la Place Vendome. El local número 26 fue sede de las mágicas creaciones de Boucheron, donde se ofrecían joyas con imágenes de animales, flores y, como un símbolo icónico, serpientes.

Sus obras eran tan refinadas que cautivaron a clientes de prestigio, como los escritores Marcel Proust y Oscar Wilde, la familia real británica, las actrices Rita Hayworth, Greta Garbo y Marlene Dietrich, y las dinastías estadounidenses Vanderbilt, Rockefeller y Astor. Frederic Boucheron se convirtió en un reconocido joyero de lujo  que no dudó en diseñar las piezas más diferentes y extravagantes, estableciendo el tono en este competitivo mercado.

En el año 1898, Boucheron abrió su primera tienda en Rusia, concretamente en la ciudad de Moscú, donde murió cuatro años después. Su hijo Luis se hizo cargo de la compañía hasta su muerte en 1959. Es entonces que los dos hijos de Louis, Fred y Gerard, toman el control de la empresa, expandiendo el negocio en 1973 en Asia con la apertura de su primera boutique ubicado en Tokio.

Con el fin de ofrecer a los clientes una amplia gama de productos innovadores, Boucheron decide entrar en el mundo de los perfumes y lanza su fragancia, la cual fue nombrada Boucheron. Fue creada para las mujeres y se inspiró en la elegancia, el lujo y la clase francesa. Esta fragancia fue un hito ya que las botellas estaban adornadas con perlas, metales preciosos y diamantes, y se combinaban también con las sofisticadas creaciones relojeras.

En los años siguientes se creó el reloj Boucheron Pour Homme, con un estilo clásico rectangular y un brazalete azul zafiro.

150 años de historia identifican a esta empresa, la cual se dedica a la creación de joyas de prestigio, objetos de arte y relojes de lujo con auténticas piedras preciosas, platino, oro y acero, todo ello combinado con la pasión y con el objetivo de ofrecer productos que superan las expectativas de los clientes, quienes consideran a estas joyas como sinónimo de riqueza y emoción.

Con un espíritu francés y un alma suiza, Boucheron es reconocida por sus líneas increíblemente delicadas, su equilibrio en las proporciones y su mano de obra perfecta. La marca creó el primer brazalete-joya intercambiable con cierre invisible.

Es importante notar que en el año 2000, el Grupo Gucci compró las tradicionales joyas de Boucheron y, a cargo del Grupo PPR, ha abierto tiendas en Tokio, San Francisco, Londres, Dubai, Seúl, Shanghai y Hong Kong.

Además, en el 2008 Boucheron renovó su marca a través de la Internet,  para celebrar sus 150 años de experiencia y dar a conocer sus más de 1.500 productos, incluyendo relojes, joyas y perfumes, lo que facilita a los clientes no sólo el encontrar las piezas en las tiendas, sino también en el portal.

La sede de Boucheron se encuentra todavía en París, Francia, pero la marca también está presente en 40 países con un total de 38 tiendas y 450 empleados. Su actual presidente es Jean Christophe Bedos, quien ha asegurado que la firma es reconocida por su innovación, refinamiento y lujo.